¿Te has preguntado alguna vez acerca de la importancia que tiene la refrigeración y el frío industrial en nuestras vidas? Gracias a esta técnica que consiste en bajar o mantener el calor, bien a través de agua (enfriamiento evaporativo) o a través de gases refrigerantes, podemos conservar durante más tiempo los alimentos perecederos.
Para que los alimentos puedan llegar a nuestras casas en perfecto estado es necesario formar una cadena para su conservación, la cadena del frío: desde cámaras e instalaciones frigoríficas en almacenes y en el transporte de alimentos, pasando por la refrigeración comercial en supermercados y pequeños comercios, hasta llegar al consumidor final, que normalmente utiliza el frigorífico y el congelador para conservarlos.
Uno de los objetivos principales de la refrigeración es, por tanto, evitar deterioros y pérdidas de alimentos y además, la refrigeración es uno de los sistemas más económicos para conservar productos perecederos. Según datos de la FAO, se calcula que alrededor de 360 millones de toneladas de alimentos perecederos se pierden en el mundo por un uso insuficiente de sistemas de conservación y el 20% de la producción mundial de alimentos se pierde por fallos en el ciclo de refrigeración. Esta tasa de pérdida se duplica en los países en vías de desarrollo y menos avanzados.
Por tanto, cabe preguntarse cómo podemos mejorar la eficiencia energética en este sector, más concretamente en el sector de la refrigeración comercial para garantizar una conservación eficaz de los alimentos. Además, la nueva normativa F-Gas compromete la viabilidad de nuevas instalaciones basadas en las actuales soluciones de refrigeración comercial, ya que generalmente las instalaciones de refrigeración en supermercados funcionan mediante expansión directa de gas refrigerante, por lo que urge buscar nuevas soluciones para evitar el uso de gases de efecto invernadero en las instalaciones frigoríficas.
En este sentido, desde Caloryfrio.com queremos destacar la labor que ha hecho en este ámbito el proyecto Efimarket, promovido en el seno de la Asociación de Fabricantes Andaluces de Refrigeración y Climatización (AFAR) junto con la participación como Organismo de Investigación del Instituto Andaluz de Tecnología (IAT) y en el que han participado INTARCON, INFRICO, IMPAFRI, CORECO Y DOCRILUC. Este proyecto se ha centrado en la «Eficiencia y sostenibilidad de las instalaciones centralizadas de refrigeración y climatización en supermercados«.
Proyecto Efimarket
El objetivo principal de este proyecto ha sido el de desarrollar e investigar sistemas eficientes y sostenibles para la refrigeración y climatización de supermercados, debido a la entrada en vigor de la nueva normativa F-Gas, que limita el uso de gases refrigerantes antes de 2030 por otros de menor PCA (Potencial de Calentamiento Atmosférico), es decir, que la nueva normativa trabaja para que se estandarice en el sector de la refrigeración el uso de gases refrigerantes con menos impacto ambiental.
Para conseguir una mayor eficiencia energética y sostenibilidad en el sector de la refrigeración comercial el proyecto Efimarket ha desarrollado un sistema indirecto de refrigeración con glicol basado que consigue reducir el consumo de energía en el supermercado en torno a un 20% , consiguiendo un 15% de ahorro energético en recuperación de calor para calefacción y mayor rendimiento de las instalaciones frigoríficas.