Evita pérdidas de energía
El aislamiento de la vivienda influye en la conservación de la temperatura en el interior de la vivienda. Sellar las puertas y ventanas puede representar la diferencia entre aprovechar el frío que genera el equipo de climatización o malgastar la energía generada. Según el IDAE introducir mejoras en el aislamiento puede conllevar ahorros energéticos de hasta un 30% en calefacción y aire acondicionado.
La instalación de toldos y bajar las persianas también influye en el consumo energético, ya que evitar el impacto directo del sol reduce el uso del aire acondicionado. Tener en cuenta este tipo de medidas es importante para hacer un uso más eficiente de los equipos. También es conveniente ubicar las unidades exteriores de tal manera que se protejan lo más posible del impacto directo del sol, ya que este factor también incrementa el consumo energético y evita que se deteriore el aparato.
Ventilar la vivienda a primera hora y al caer el sol para refrescar la casa de forma natural. conveniente aprovechar estos momentos para que descanse el aparato de aire. Incluso, usar un ventilador puede ser una opción recomendable dado su bajo consumo energético con el que se puede conseguir un confort aceptable para los días no tan calurosos, ¡Ténlo en cuenta!
Controla la temperatura
Según recomienda el IDAE a través de la «Guía de la Energía» La temperatura ideal para el aire acondicionado es de unos 26 grados, temperatura suficiente para tener confort en la vivienda. En cualquier caso una diferencia de temperatura con el exterior superior a 12ºC no es saludable. Programar la temperatura por debajo de esta temperatura producirá un incremento en el consumo energético, entre un 7 y un 8% más de consumo, además de generar disconfort térmico.
Es más recomendable y eficiente programar el equipo para que enfríe progresivamente a una temperatura entre 26-27 grados y si nos vamos a ausentar varias horas es preferible apagar el equipo de aire acondicionado para que no se dispare el consumo.
Aprovecha las funciones que te ofrece tu equipo de aire acondicionado. Los modos de ahorro de energía reducirán el consumo energético, al no usar toda la potencia del equipo. Los sensores de presencia, que se enciendan/apagan en función de la entrada/salida de personas de la estancia, optimiza el uso del aire acondicionado ya que, si nos ausentamos en la propia casa unos minutos, el equipo de aire acondicionado se detiene. El modo de funcionamiento nocturno también ofrece la posibilidad de dormir confortablemente con menor consumo del aparato.
Mantenimiento adecuado
Un correcto mantenimiento es imprescindible para garantizar un buen rendimiento del equipo y evitar posibles averías, fugas del refrigerante, etc,…-. La limpieza de los filtros de aire acondicionado mejorará el funcionamiento del equipo. No te olvides de poner a punto tu aparato de aire y contacta con un profesional si tienes alguna duda.
Esperamos que estos consejos para usar de forma eficiente el aire acondicionado te sirvan para tener confort en tu casa sin que se dispare el consumo eléctrico.