Desde hace algunos años, el consumo eléctrico en verano se ha igualado al consumo que realizamos durante el invierno, y esto es una consecuencia directa del uso del aire acondicionado en estas fechas. Diversos estudios aseguran que el consumo de la electricidad aumenta sustancialmente en verano. Por lo que, si no queremos llevarnos sustos indeseados este verano, lo más conveniente es repasar ciertos aspectos para reducir el consumo eléctrico derivado del aire acondicionado.
Para conseguir este ahorro no hay atajos: las características técnicas del aparato y el uso eficiente del mismo son los elementos que podemos aprovechar para reducir el consumo eléctrico de nuestro aire acondicionado.
Características del equipo de aire acondicionado
Clasificación energética
La clasificación energética puede ser un indicador del consumo que va a tener nuestro aire acondicionado. El Parlamento Europeo estableció una escala de la A a la G, siendo la A el indicador de eficiencia energética más elevado y la G, el más bajo, y cuanto mejor sea la clasificación energética del equipo, el sistema será más eficiente. Por ello, es recomendable que los sistemas que vayamos a adquirir sean siempre de una elevada clasificación energética.
Un equipo de aire acondicionado con clasificación energética tipo A puede ver reducido su consumo hasta en un 30% y además, la tecnología que incorpora le permite variar la capacidad del equipo, ajustar la potencia a la temperatura deseada y funcionar de un modo más eficiente.
Consumo energético (Kwh)
Otro indicador a tener en cuenta es el consumo eléctrico anual expresado en Kwh , dato que aparece en la etiqueta energética del aire acondicionado y que nos indicará el consumo medio del equipo en cuestión.
Potencia del equipo de aire acondicionado
Conocer la potencia del aparato también es fundamental, y en este caso recordemos que no es lo mismo la potencia térmica del aparato a la potencia eléctrica. Mientras la potencia térmica se refiere a la capacidad de refrigeración del equipo, la potencia eléctrica lo hace a la potencia eléctrica instalada. La potencia eléctrica va a ser siempre menor que la potencia térmica, ya que la primera es el consumo real y la segunda la capacidad de enfriar que tiene el equipo. Es importante no confundirlas.
Superficie (m2) | Potencia térmica (kW) | Potencia eléctrica (kW) |
0-30 | 2,5 | 0,5 – 0,8 |
30 – 40 | 3,5 | 0,9 – 1,2 |
40 – 60 | 5 | 1,5 – 1,9 |
60 – 90 | 7,1 | 2 – 2,6 |
90 – 120 | 10 | 2,7 – 3,7 |
120 – 140 | 12,5 | 3,9 – 4,4 |
140 – 180 | 14 | 4,3 – 5,6 |
Calcula la potencia que necesitas para tu aparato de aire acondicionado
Eficiencia energética, SEER y COP
Otros datos de interés para conocer el rendimiento del aparato son el SEER (coeficiente de eficiencia en refrigeración) y el COP, el coeficiente de eficiencia en modo calefacción en el caso de que el aparato sea una bomba de calor reversible, es decir, que proporcione tanto aire acondicionado como calefacción.
Tecnología Inverter
Que el equipo disponga de tecnología inverter también influye en el rendimiento y en el consumo energético del aparato de aire. La tecnología inverter regula el funcionamiento del compresor y hace que éste trabaje de una forma continua por lo que su funcionamiento es más eficiente y repercute en el ahorro de energía. Los equipos que disponen de tecnología inverter consiguen hasta un 40% de ahorro energético respecto a otros equipos que no disponen de esta tecnología.
Consejos de uso del aire acondicionado
Si tras adquirir un equipo eficiente, con la potencia que necesitas, tecnología inverter y realizas un uso inteligente del equipo, los ahorros obtenidos pueden ser importantes. Ten en cuenta las recomendaciones generales para un uso eficiente del aire acondicionado.
Como medidas de correcto uso del aire acondicionado, podemos destacar un aislamiento adecaudo, cerrar las persianas y ventanas para evitar el calor, no dejar el aire encendido durante todo el día, mantener una temperatura media entre 22-24 grados de temperatura e incluso acompañar el uso del aire acondicionado con ventiladores. Esto favorecerá el confort óptimo en la vivienda y reducirá el consumo eléctrico del aire acondicionado.